«No sólo quiero hacer una fotografía con algunas cosas en el fondo. El entorno ha de contribuir a la composición y a la comprensión de la persona. No importa el tema, tiene que ser una fotografía interesante. Hacer solamente el retrato de una persona famosa no significa nada».
© Arnold Newman
© Arnold Newman
En 1942 Arnold Newman empieza su serie de retratos a personalidades famosas realizados en su ambiente natural; consideraba “estéril” el retrato de estudio y según sus propias palabras decía, «Necesito salir, entrar en las casas de la gente, asumir riesgos».
En 1946 Igor Stravinski, fue una de esas personalidades y como podemos ver en la hoja de contactos, Newman no dudó en recortar y reducir a la mínima expresión el fotograma consiguiendo una imagen icónica. Si nos abstraemos podremos incluso ver la nota musical que forman Stravinski y su piano.
Y desde luego que arriesgaba ya que la fotografía del músico no fue elegida por la revista que le hizo el encargo por su atrevida composición.
Fuentes y referencias
Blog Mis ojos ven
