«Siempre hago fotografías de lo que tiene que ver conmigo, nunca fotografío lo que me es ajeno» Josef Koudelka
© Josef Koudelka / Magnum Photos
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La invasión de Praga
Checoslovaquia, agosto de 1968
En la noche del 21 de agosto de 1968 las tropas rusas estaban entrando en Praga.
Me levanté a las 3 o 4 de la madrugada, salí a la calle y empecé a tomar fotografías. Hice lo mismo durante una semana. Entonces usaba película de cinematografía que era mucho más barata, por eso la hoja de contactos está numerada a mano. Toda la secuencia se tomó durante la parte más violenta de la confrontación, en la mañana del primer día de la invasión, cerca de la sede de Czechoslovak Radio; una de las prioridades de los rusos era silenciar la emisora. La muchedumbre protegía el edificio pero llegaron los tanques y los soldados consiguieron entrar a pesar de los manifestantes.
Lo que estaba pasando en Checoslovaquia afectaba directamente a mi vida. Era mi patria, mi problema. Esto era precisamente lo que marcaba la diferencia entre los otros fotógrafos extranjeros y yo, que no era un reportero gráfico. No sabía nada del periodismo fotográfico. Nunca fotografiaba “noticias”. Fotografiaba gitanos y gente del teatro. De repente, por primera vez en mi vida, me enfrentaba a una situación de este tipo. La afronté. Era consciente de que fotografiar era importante, y lo hice. No pensaba demasiado en lo que estaba haciendo. Tomé esas fotografías para mí mismo, sin intención de publicarlas.
Por casualidad, alguien en Praga vio las imágenes. Algunas de ellas fueron sacadas secretamente del país y acabaron en Nueva York. Durante diecisiete años no las publiqué con mi nombre para no poner en peligro a mi familia. Los créditos indicaban simplemente: “Copyrigth Magnum PP” (Prague Photographer, Fotógrafo de Praga)
( Extracto del Libro, Hojas de contacto de Magnum )