NEWSHA TAVALOKIAN
Por Maitane Pérez de Nanclares
Alumna del Curso Avanzado de Fotografía Blackkamera
Tras indagar sobre varias fotógrafas y colectivos he de reconocer que el descubrir al “Colectivo Rawiya” y dentro de él a Newsha Tavalokian cada vez vi más claro que era ella sobre la persona que quería hablaros.
Os diré que el Colectivo Rawiya (que se traduciría como “Ella, la que cuenta una historia) se trata de un colectivo de mujeres fotógrafas de Oriente Medio cuya finalidad es trasladarnos su punto de vista en una sociedad con tanto problemas políticos y sociales. Trabajan tanto desde el punto de vista del reportaje periodístico como de la fotografía artística. A día de hoy además de mujeres también se ha incorporado algún hombre. Actualmente en lo que respecta a su página web no encuentro información sobre la fotógrafa que tanto me ha fascinado. Pero se que durante varios años fue parte de dicho colectivo que también os recomiendo echéis un vistazo.
“Mi fotografía se centra en iluminar aquellas historias que nadie ha podido contar. Como fotógrafa, intento llevar la mirada del espectador hacia los mensajes que se pierden en la cacofonía enloquecedora del mundo actual.
Quiero llamar la atención sobre los temas que muy a menudo se esfuman en el olvido en un mundo de bombardeo con ráfagas de noticias constantemente duras.
Las historias que quiero contar son aquellas que pasan inadvertidas, camufladas en el tejido de un mundo acribillado de información”
Newsha Tavalokian (Teherán 1981) comenzó su trayectoria fotográfica de manera autodidacta con 16 años tras abandonar la escuela por una severa dislexia acumulando un arsenal de experiencias profesionales trabajando en las principales publicaciones progresistas, feministas y aperturistas que nacían bajo el régimen del Presidente Khatami.
En 1999 fue la fotógrafa más joven en cubrir las revueltas estudiantiles en Irán, un punto de inflexión en el régimen de los Ayatolláhss. Su cobertura de esta noticia despertó el interés de los medios occidentales iniciando una carrera fulgurante como reportera gráfica internacional. En 2001 comenzó a cubrir la guerra entre Irán e Irak, una de las fronteras más conflictivas de Oriente Medio. Pronto se convertiría en la corresponsal internacional de Time Magazine, Newsweek, Stern, Le Figaró, The New York Times, Der Spiegel, Le Mond, NRC Handelsblad, entre muchos otros, cubriendo desastres naturales, y estallidos sociales en algunas de las zonas más conflictivas del mundo musulmán, incluyendo Siria, Líbano, Arabia Saudita, Pakistán y el Yemen.
Su sintonía con las inquietudes de una nueva generación de mujeres modernas que se identifican con la cultura islámica, la belleza sensorial de sus piezas, su exquisito dominio de los aspectos técnicos de la fotografía y su espíritu inconformista identifican a Tavalokian como una de las voces más elocuentes y representativas del nuevo orden islámico. Indomable ante las autoridades religiosas de su país y beligerante ante los tópicos occidentales (uno de sus primeros trabajos fue “Women from Axis of Evil”, Mujeres del eje del mal, 2006, parodiaba la famosa frase de George W. Bush), su trabajo al filo de lo políticamente admisible, mueve la mirada del espectador a contracorriente de los trending topic que, según la artista, dirigen la opinión pública con la batuta de los medios de masas.
Fue alumna de la Joop Swart Masterclass de 2006 organizada por World Press Photo. En 2007 fue finalista del Premio Inge Morath.
En 2009 cubrió la “Revolución verde” que la censura iraní intentó silenciar prohibiendo la entrada en el país a la prensa internacional. Su carrera artística comenzó cuando las autoridades religiosas iraníes retiraron su autorización para trabajar como reportera, desencadenando, sin saberlo, la ascensión de la joven en una de los artistas más elocuentes e influyentes del mundo islámica contemporáneo.
“Trabajo con mis fotos sin romper las reglas. Como quiero quedarme en mi país, el mío es un discurso en el que hay muchas capas de significado. Superficialmente cumple las normas, pero uso maneras de analizar la sociedad que ya no sirven tan a rajatabla la ley. El mejor arte sale de la censura porque te obliga a buscar nuevos lenguajes”.
Un tema común en su trabajo son las historias de mujeres, amigos y vecinos de Irán, la evolución del papel de la mujer en la superación de las restricciones basadas en el género, y el contraste con los estereotipos sobre Irán que aparecen en los medios de comunicación occidentales.
En su proyecto “Listen” se tuvo que autocensurar para no saltarse la ley. “En este proyecto de mujeres cantantes (en Irán está prohibido que las mujeres canten en solitario en público) la instalación original contaba con cantantes iraníes fantásticas de rap, ópera, pop y música tradicional. Conjugaba imagen y sonido. Pero tuve que eliminar este segundo elemento con las prohibiciones, lo cual provoca en el espectador una sensación de frustración, porque quieres oír y no puedes. En las fotografías realizadas las cantantes imaginan que están realmente cantando delante de una gran audiencia en vez de en un pequeño estudio. Subsecuentemente me imaginé y creé la portada de CD para cada una de estas mujeres que era mi propia interpretación de la sociedad en la cual vivimos; y asimismo, pude sentir que la caja de dicho CD estaba vacío.”.
Comentaros que otro de los proyectos que ha realizado, y que al final también veréis un pequeño vídeo sobre él, es el proyecto “Look”. “En esta ocasión he buscado un contacto más íntimo que nunca, en mi propia casa. Fijé una cámara y su trípode; delante de una venta donde he pasado horas observando la ciudad durante diez años: una ciudad que no se si amo o no. Una ventana que se enfrenta con muchas otras ventanas, todas ellas cerradas, impenetrables, que no permiten ver lo que se esconde detrás. Estas es la historia de las demás personas. Las demás personas cuyas historias personales conozco íntimamente. He capturado historias personales en esta habitación, enmarcada por una ventana que se asoma a una fría y nebulosa ciudad. Mi ciudad.”
En 2014 obtuvo el Carmignac Gestion Photojournalism Award y en 2015 el Prince Claus Foundation. En 2015 se ha convertido en miembro nominado de Magnum Photos.
Newsha Tavakolian – Look
