GABRIELE CROPPI
Por Kontxi Beraza
Alumna del Curso Avanzado de Fotografía Blackkamera
Gabriele Croppi es uno de los fotógrafos que hemos visto en clase; un joven fotógrafo Italiano nacido 1974 en Domodossola, una localidad cercana a Suiza en el norte de Italia.
En su país es considerado uno de los artistas más interesantes.
A su pasión innata por la pintura se añade su amor por la fotografía.
Dicen que sus imágenes revelan influencias de la pintura, la fotografía clásica y el cine y que pueden parecer ilustraciones en blanco y negro, pero en realidad son fotografías.
Durante años se dedicó al reportaje trabajando en Los Balcanes y en diversas zonas de Latinoamérica.
Gabriele Croppi es un artista que primero trabajó con la pintura en sus años de la niñez. A continuación, agregó la fotografía y más tarde, el cine a su lista de artes, y desde entonces ha tratado de conectar el mundo de las artes con el mundo de la fotografía y viceversa.
Desarrolló una investigación sobre arte, fotografía y pintura, entre otros:
.La pintura: Omagio to Sironi en 2007
.La Literatura: trabajos inspirados en la poesía de J.L. Borges y Fdo. Pesoa, 1998-2004
“Mi acercamiento a la fotografía es multidisciplinar” “Estoy interesado en el diálogo que la fotografía puede tener con otras disciplinas, como la literatura, la pintura y el cine” – dijo Croppi
(Un hombre con un maniquí desnudo)
Por su ensayo “La Metafísica de un Paisaje Urbano” fue galardonado con el primer premio en la categoría de Arquitectura, para lo cual viajó a diferentes lugares de Europa y EE.UU., fotografiando la ciudad en Blanco y negro, fotografías de fuertes contrastes que casi parecen irreales.
A diferencia de la mayoría de fotógrafos que toman fotos turísticas típicas de los monumentos más reconocibles del mundo, Gabriele Croppi transforma las ciudades más grandes en escenas cinemáticas.
La mayoría de los temas de Croppi son fácilmente identificables ya que siempre hay un hito emblemático en la escena: La Torre Eiffel o la Torre de Pisa, etc., son lugares familiares para la mayoría de la gente, pero Croppi los representa de manera diferente, solitarios y en un mar de blanco y negro, retratos más bien sombríos.
Vive en Milán (2015) y trabaja en diversos campos : enseña en el Instituto Italiano de fotografía, en el campo editorial, fotografía y cine.
Ha recibido diversos premios italianos y españoles.
