Últimos años
Lake George
Antes de dejar definitivamente la fotografía en 1937 debido a su deteriorada salud, Stieglitz firma lo que constituye, junto con los “Equivalents», un verdadero legado espiritual. Sus últimas imágenes son las de los árboles de Lake George, como celebración de la primavera o cuestionamiento cuando fotografía los viejos álamos en agonía.
Después de la Primera Guerra Mundial, la difusión de los trabajos de Stieglitz es bastante limitada. Aunque expone con regularidad, prefiere limitar las publicaciones en las revistas.
A su muerte en 1946, algunas de sus fotografías ya han entrado, desde hace unos veinte años, en las colecciones del Museum of Fine Arts de Boston, en el Metropolitan Museum y en el Museum of Modern Art de Nueva York.
Para entonces, ya ha ganado su combate por el reconocimiento artístico de la fotografía.
La inteligencia y la ausencia de prejuicios con que ha sabido mostrar un interés igual por las distintas formas de arte: pintura, escultura, fotografía, lo convierten en un espíritu pionero y en uno de los artesanos del nacimiento del arte moderno en los Estados Unidos.
Síntesis
El conjunto de la obra de Alfred Stieglitz, que abarca un periodo de casi cincuenta años de experimentos creativos, proyecta un análisis completo y una síntesis de esa máquina que es la cámara.
Utilizando los métodos y materiales que pertenecen exclusivamente a la fotografía, Stieglitz demostró sin lugar a dudas que, cuando esa máquina -la cámara- es guiada por un artista de gran sensibilidad y honda percepción, es capaz de producir y plasmar el perfecto equivalente de un pensamiento y un sentido unitarios. Esa unidad podría calificarse de visión de la vida, de las fuerzas que cobran forma en la vida. El conjunto de su trabajo constituye, por tanto, una obra monumental.
Sin embargo, él no calificaba de «arte» su obra; antes bien, sostenía que se trataba simplemente de fotografía. Dilucidar si la fotografía es o no arte, parece una cuestión académica, que cabe dejarse al arbitrio de aquellos a quienes preocupa especialmente el que algo sea arte o no.
Ha sido la visión de este artista, de este intuitivo buscador de conocimiento, la que, en este mundo moderno, se ha adueñado del mecanismo y los materiales de una máquina y ha señalado el camino a seguir. Stieglitz es quien vuelve a insistir, a través de la ciencia de la óptica y de la química de la luz, los metales y el papel, en el valor eterno del concepto de artesanía, por ser el único camino que lograba satisfacerle y porque sabía que esa calidad de la obra es condición previa para la calidad de la vida. Mediante un control creativo consciente de esta fase concreta de la máquina, Stieglitz elaboró un nuevo método para percibir la vida de la objetividad y dejar constancia de ella.
Principales obras
“La última broma—Bellagio” (1887)
“Rayos de sol—Paula, Berlín” (1889)
“Aguaceros de primavera” (1900-1901)
“La mano del hombre” (1902)
“The Steerage” (“El entrepuente”) (1907)
“El carro de heno” (1922)
“Equivalents” (1931)
Curiosidades
Alfred Stieglitz es encuentra entre uno de los cinco artistas más influyentes del Siglo XX. Los otros cuatro, fueron: Orson Welles (actor, productor y director de cine), Elia Kazan (director y escritor de cine), John Ford (director de cine) y Man Ray (fotógrafo y pintor).
De todos ellos, sólo Stieglitz vivió la segunda mitad del Siglo XIX y la primera del XX.
Bibliografía
www.musee-orsay.fr
www.metmuseum.org
www.nuevarevista.net
es.wikipedia.org
blogs.bluekea.com/davidortega
www.fotonostra.com
www.xatakafoto.com
biografiadefotografos.blogspot.com.es