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Letras y Fotografía # 79 Elliott Erwitt

ELLIOTT ERWITT. MAESTRO DEL MOMENTO DECISIVO.

Por Nere Soriano
Alumna del Curso Avanzado de Fotografía Blackkamera

«Se trata de reaccionar a lo que se ve, de esperar sin prejuicio. Puedes encontrar fotos en cualquier lugar. Es simplemente una cuestión de darse cuenta de las cosas y organizarlas. Sólo tienes que preocuparte por lo que te rodea y preocuparte por la humanidad y por la comicidad del ser humano. «- Elliott Erwitt.

Elliott Erwitt merece un hueco entre los fotógrafos de “Hitzak eta Argazkiak” básicamente por dos motivos: el primero es que tiene fotografías que consiguen sacarle una sonrisa a quien las contempla y el segundo es su gran capacidad para captar instantes únicos e irrepetibles. No en vano se le conoce como el MAESTRO DEL MOMENTO DECISIVO.

Elliott Erwitt

Erwitt nació el 26 de julio de 1928 en Paris, pero transcurrió su infancia en Italia. Posteriormente, en el año 1939, emigró junto a su familia a Estados Unidos, primero a Nueva York y después a Hollywood, Los Ángeles, donde comenzó su interés por la fotografía. Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial ejerció como fotógrafo militar del ejército estadounidense en Francia y Alemania. A la edad de 25 años se unió a la prestigiosa agencia Magnum de la mano de Robert Capa y acabó convirtiéndose en una de las principales figuras en el campo de la fotografía documental y el fotoperiodismo. De hecho, su obra ha sido expuesta en museos y galerías de todo el mundo, como el MoMA de Nueva York, el Instituto Smithsonian, el Instituto de Arte de Chicago, el Museo de Arte Moderno de Paris, la Kunsthaus de Zurich… Sin embargo, Erwitt no solo ha destacado como fotógrafo, sino que también se ha atrevido con el cine y los documentales.

Admirador y digno heredero del famoso fotógrafo Henri Cartier-Bresson, Elliott Erwitt es capaz de aprovechar el momento justo para apretar el disparador de su cámara. Su prioridad a la hora de sacar una fotografía no es la perfecta composición de la imagen, sino el captar “ese instante”, de manera que obtiene tomas frescas y espontáneas, todas en blanco y negro. Es por ello por lo que Erwitt no coge la cámara con ideas preconcebidas de lo que quiere fotografiar; simplemente sale a la calle plagado de curiosidad hacia las pequeñas cosas y las personas simples en busca de situaciones absurdas, divertidas, paradójicas e irónicas de la vida cotidiana. Y las encuentra, consiguiendo hacernos sonreír e inducirnos a la reflexión. Sin embargo, también utiliza la fotografía para hacer crítica y mostrar al mundo su preocupación social y política.

Aunque Elliott Erwitt es un fotógrafo capaz de sacar un amplio espectro de sujetos, emociones e impresiones, a lo largo de su trayectoria profesional destacan los siguientes temas: los perros, los niños, los personajes famosos –desde el ambiente político al del cine– (Jackeline Kennedy, Charles de Gaulle, Fidel Castro, Grace Kelly, Marilyn Monroe…) y el romanticismo.

En concreto, los perros han sido uno de los motivos más fotografiados por Erwitt, a menudo en compañía de sus dueños, y bajo un punto de vista especial: desde el suelo, en la mayoría de las ocasiones. Se dice, incluso, que solía ladrarles de pronto a los perros que iba a fotografiar para ver su reacción. En relación con este tema, Erwitt tiene una curiosa serie llamada “Dogs” donde muestra diversas situaciones cómicas y paradójicas con los perros como protagonistas.

Elliott Erwitt

Para Erwitt los niños son, junto a los perros, sujetos ideales para retratar debido a su naturaleza y espontaneidad, perfectos para crear tomas de una gran carga emotiva.

Finalmente, a pesar de su predilección por la ironía y el humor, Erwitt muestra también una gran sensibilidad cuando se habla de amor, con fotografías a la altura de los maestros del romanticismo, pero no por ello privadas de su toque inconfundible.

Elliott Erwitt

Y este es un pequeño resumen de la vida y obra de un autor capaz de contar historias con una buena dosis de audacia, humor e inteligencia. No importa que sea una fábula irreal, una comedia sobre perros y amos o un relato bélico. Lo importante es que siempre tiene algo que contar.

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