Entrevista del colaborador de Blackkamera, David Tijero Osorio.
El nombre de La fotógrafa Lua Ribeira viene asociado a la Agencia Magnum desde que en 2018 se anunciara su nominación a convertirse en miembro de pleno derecho de la misma. Un hito que ha puesto especial interés en toda la obra que desde entonces ha ido desarrollando.
¿Cómo te encuentras tras tantos largos meses de pandemia y todas las restricciones que ha supuesto?
Bien, he seguido trabajando, aunque no directamente sobre el tema.
¿Este tiempo de parón forzoso te ha servido de algún modo de inspiración o ha abierto nuevas vías de trabajo o temáticas a abordar?
Sí. El trabajo sigue creciendo desde la misma raíz, pero estoy experimentando con nuevas maneras de hacer y tratando de profundizar más en los temas que ya estaba desarrollando.
Para quien no conozca tu obra, ¿cómo se la describirías en pocas palabras? ¿cuáles serían a grandes rasgos el estilo y las inquietudes que definen tu trabajo?
Sería mejor verla que explicarla. Mi interés es por las imágenes, no solo fotográficas. Y me interesa la fotografía desde esa percepción, de imagen, que sea como sea, es construida. En el proceso fotográfico me interesan las tensiones que se generan y el aprendizaje que se da al trabajar, los accidentes. Utilizo mucho la repetición o representación de acciones muy elementales. Me interesa esa parte más teatral.
No me interesa tanto la parte más testimonial, la información, el contexto, etcétera. Las imágenes fijas tienen limitaciones en ese sentido y creo que además eso es lo mas poderoso de ellas.
“Me interesa la parte más teatral de la fotografía. No tanto la parte más testimonial, la información, el contexto, etcétera. Las imágenes fijas tienen limitaciones en ese sentido y creo que además eso es lo más poderoso de ellas.”
¿Cuál es tu relación con los referentes en fotografía que durante tu formación hayas podido tener?, ¿sigues teniéndolos presentes? ¿los has interiorizado del todo o sientes más bien que es necesario trascenderlos para crear una voz propia a la hora de expresarse mediante imágenes?
Mis referentes más cercanos son más pintoras que fotógrafos. Bebo mucho de algunos artistas de distintas épocas que se han convertido como maestros para mí a través de sus imágenes. Sí, hay que trascenderlos, claro, pero por algo hay que empezar también.
En tu trabajo tiene gran importancia el retrato, una de las disciplinas más complicadas en fotografía, ¿tienes alguna especie de ritual para que el retratado de algún modo se «olvide» del objetivo y consigas así capturar su esencia más allá de poses o gestos que se muestren forzados?
Sí, creo que el trabajo hasta cierto punto, trata de eso. Pero me cuesta mucho trabajo ese proceso, que es para mí algo muy intuitivo que surge dependiendo de los lugares, las personas, los encuentros. No hay formulas claras.
Llama la atención que, a pesar de tu juventud, tu nombre ya se haya asociado a la prestigiosa Agencia Magnum, ¿cómo ha sido el proceso de entrar a formar parte de la misma? ¿puede hablarse en la trayectoria profesional de un fotógrafo de un antes y un después tras algo así?
El proceso está siendo muy bueno para seguir trabajando con intensidad. En mi caso, entré como nominada muy poco después de haber empezado a fotografiar, entonces estoy creciendo mucho dentro de la agencia.