Scroll to top

Letras y Fotografía #110 Alain Laboile

Problemas del primer mundo

Por Esther Etxezarraga Ugalde, alumna del Curso Medio de Blackkamera

Una se anima a realizar un curso de fotografía y como ejercicio le solicitan escribir sobre algun@ autor@. Ejercicio francamente complicado cuando la cultura fotográfica de la alumna es escasa (por no decir nula) siendo además de las primeras en tener que presentar el trabajo, La Ley de Murphy lo llaman.

Que no cunda el pánico, google y wikipedia son grandes aliados.

Búsqueda en google:

`fotógraf@s de la historia´

`salir airosa ante una circunstancia adversa´

`cómo parecer que sabes cuando no sabes´

`qué estoy buscando??´

FOTOS!!!

A veces no hay que buscar, simplemente te encuentran. Algo ha captado mi atención, mejor dicho, la obra de alguien. Qué tecla han tocado Esther? Qué es lo que se ha removido dentro de ti y por qué?

Una tecla que te acecha y te persigue hace tiempo, la tecla de la nostalgia.

Se dice que la edad está en la actitud, en la mente, pero no es cierto. A medida que vamos cumpliendo años ciertas cualidades se van desvaneciendo, marchitando, simplemente envejecemos. Inevitablemente, adquirir madurez va unido a la pérdida en el sentido más amplio de la palabra.

Un simple olor o una visión efímera son suficientes para evocar épocas pasadas, mejores épocas pasadas.

El sufrimiento es inherente a la vida, quién pudiera vivir eternamente con las gafas de `la primera vez´.

Miro y remiro las fotos y evoco `mi primera vez´.

Nunca volveré a ser tan inocente, tan espontánea, tan ingenua, tan fantasiosa, tan libre, tan retadora, tan primaria, tan intensa, tan instintiva, tan pasional..en definitiva..nunca volveré a ser niña

Miramos el mundo una sola vez, en la infancia. El resto es memoria.

ALAIN LABOILE (Burdeos, 1968). Fotófrafo, escultor y padre de 6 hij@s.

`LA FAMILLE´

FAMILIA Un proyecto de fotografía de Alain Laboile

“Soy padre de seis hijos. A través de mi trabajo fotográfico celebro y documenté mi vida familiar: una vida al borde del mundo, donde la atemporalidad y la universalidad de la infancia se encuentran. Día a día creo un álbum familiar que constituye un legado que dejaré a mis hijos.

Mi trabajo refleja nuestra forma de vida, girando en torno a su infancia. Mis fotografías serán el testimonio de eso. En cierto modo, mi enfoque puede considerarse similar al de un etnólogo.

Aunque mi trabajo es profundamente personal, también es accesible, aborda la naturaleza humana y permite al espectador entrar en mi mundo y reflexionar sobre su propia infancia. Alimentada todos los días y compartida con el mundo a través de Internet, mi producción fotográfica se ha convertido en un medio de comunicación que lleva a cuestionar la libertad, la desnudez, el ser y el tener ”

Relacionados